Por Anna Sophia Doyle*
El Día Internacional de la Mujer se celebra el 8 de marzo y el tema de este año es «Por un Planeta 50-50 en 2030: Demos el paso para la igualdad de género». Aunque todavía queda mucho camino por recorrer para lograr esa meta, la realidad para las mujeres en el 2016 es drásticamente distinta a la de nuestras abuelas y bisabuelas. La potenciación política y económica de las mujeres ha sido un de los logros más importantes del último siglo. Millones de mujeres lucharon por su derecho al sufragio a comienzos del siglo y la siguiente generación acudió masivamente a las fábricas para contribuir a los esfuerzos que ayudaron a ganar la Segunda Guerra Mundial. Hoy en día, las mujeres participan activamente en lugares de trabajo, están al mando de naciones y corporaciones multinacionales y se les reconoce por sus grandes contribuciones a las artes, la ciencia, el deporte y prácticamente todos los ámbitos de los logros de la humanidad.
No cabe duda de que las mujeres de hoy en día, a nivel mundial, tienen vidas más largas y saludables, tienen más acceso a la educación y disfrutan de muchos derechos más que las de hace unas décadas. Sin embargo, estos avances no parecen haberse traducido en mejoras más amplias, ya que las mujeres continúan experimentando brechas significativas en términos de pobreza, mercado laboral y salarios; así como la participación en la toma de decisiones privadas y públicas (Naciones Unidas, 2016). Es más, en algunos países como Bolivia, la intersección entre género y etnicidad puede profundizar las brechas en algunos resultados de desarrollo (Banco Mundial, 2016). Tampoco se ha logrado garantizar a las mujeres una vida libre de violencia; los datos revelan que casi un 50% de las mujeres asesinadas a nivel mundial han sido matadas por sus parejas y que 1 de cada 3 mujeres alrededor del mundo son víctimas de violencia física o sexual (UN Women, 2016).
En Bolivia también se han visto mejoras en cuanto a la igualdad de género, y sin embargo siguen habiendo grandes desafíos. Se han observado algunos avances en indicadores relacionados con género, como la tasa de participación laboral femenina, la tasa de alfabetización de mujeres adultas y el porcentaje de mujeres en parlamentos nacionales (ver Gráfico 1). También hay varios aspectos positivos que resaltar en cuanto a reformas legislativas, especialmente desde la adopción de la Nueva Constitución Política del Estado en el 2009, que establece la igualdad de géneros y penaliza la violencia por razón de genero. Bajo la nueva constitución existen muchas leyes para proteger a las mujeres, entre ellas la Ley núm. 348 de 2013 (Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia), la Ley núm. 243 (Contra el Acoso y la Violencia Política hacia las Mujeres) y varios planes nacionales estratégicos para garantizar la igualdad de oportunidades (Ministerio de Justicia Estado Plurinacional de Bolivia y ONU Mujeres Bolivia, 2015).
Gráfico 1: Indicadores de género, 2000 y 2012
El Women’s Economic Opportunity Index es uno de los varios índices que intentan medir la equidad de género y nos permiten ver los avances de Bolivia en comparación con la región y el resto del mundo. Este índice incluye indicadores sobre política y práctica laboral, acceso a recursos y servicios financieros, educación y el estatus legal y social de la mujer, entre otros. En un rango del 0 al 100, 100 siendo el puntaje más favorable, Bolivia tiene un puntaje de 46, mientras que el promedio para América Latina y el Caribe es 55,6; y el de todos los países del mundo es 57,3. El de países de ingresos altos (según la clasificación del Banco Mundial) es 73.7. La cifra para Bolivia muestra que aunque en el país se hayan logrado grandes avances en reformas legislativas, las mujeres en Bolivia aún viven discriminación en distintos aspectos de sus vidas. La situación del país también es preocupante en cuanto a violencia contra las mujeres. Según un estudio elaborado por la Organización Panamericana de la Salud que incluye datos de 12 países de la región, en el 2013 Bolivia encabezó la lista de incidencia de violencia física o sexual por parte de una pareja, con un 52,3% de la mujeres habiendo experimentado este tipo de violencia (OPS, 2013).
Evaluar la condición de la equidad de género es sumamente importante para el desarrollo de los países. Será imposible que las sociedades alcancen su mayor potencial y enfrenten los retos del Siglo XXI sin la participación activa de hombres, así como de mujeres. Es más, se ha comprobado que invertir recursos en mujeres, especialmente en la educación de niñas y adolescentes, es una herramienta poderosa para hacer frente a muchos de estos retos, como la reducción de la pobreza. Los datos muestran que si las niñas completan la educación primaria y secundaria tienen más posibilidades de tener ingresos, tienen menos embarazos no deseados y logran romper el ciclo de la pobreza (Banco Mundial, 2015).
Así que en futuras ocasiones, en lugar de felicitar y regalar flores, celebremos los avances logrados gracias al esfuerzo y sacrificio de mujeres y hombres valientes, evaluemos la situación de los derechos de la mujer en nuestras comunidades y nuestros países, y pensemos críticamente sobre nuestras acciones y cómo estamos contribuyendo o restando a la lucha por la equidad de género. Solo así lograremos un Planeta 50-50.
Referencias
Grown, C. y Lundwall, J. (2016). In Bolivia, being female and Indigenous conveys multiple disadvantages. [Blog] Voices: Perspectives on Development. Disponible en: http://blogs.worldbank.org/voices/bolivia-being-female-and-indigenous
Ministerio de Justicia Estado Plurinacional de Bolivia y ONU Mujeres Bolivia. (2015). CEDAW: Cómo enfrentar la discriminación contra la mujer en Bolivia. La Paz: ONU Mujeres Bolivia, pp. 3-20.
UN.org, (2015). Goal 3 Promot Gender Equality and Empower Women [en línea]. Disponible en: http://www.un.org/millenniumgoals/gender.shtml. [Consultado el 8 de marzo de 2016.]
-conveys-multiple-disadvantages [Consultado el 7 de marzo de 2016].
Unwomen.org, (2016). Facts and Figures: Ending Violence against Women [en línea]. Disponible en: http://www2.unwomen.org/en/what-we-do/ending-violence-against-women/facts-and-figures. [Consultado el 8 de marzo de 2016.]
Worldbank.org, (2015). Girl’s Education [en línea]. Disponible en http://www.worldbank.org/en/topic/education/brief/girls-education. [Consultado el 8 de marzo de 2016.]
*La autora es investigadora junior de INESAD, licenciada en Economía, annasophiadoyle@gmail.com
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